domingo, 9 de septiembre de 2012

LA ALDEA PTAYSANWEE ESTÁ VACÍA

Llega septiembre y el anciano Awi Ni'ta regresa a la aldea tras el descanso veraniego. Sabía que se iba a encontrar con esto, con la aldea vacía, pero no puede evitar la emoción de la vuelta y la nostalgia por sus jóvenes aprendices. Han sido cuatro años de compartir muchas horas en las que ha habido de todo, pero sobre todo compromiso por aprender y por pasarlo bien aprendiendo. 

Ahora no están. Awi Ni'ta no puede evitar los recuerdos y la emoción que le traen. Solo espera que lo realizado les sirva, para sus aprendizajes futuros en el instituto y sobre todo para la vida; que no olviden lo importante que es el grupo, la ayuda, la solidaridad, el quererse a sí mismo y a los demás (cuanto más quieres a los demás, más grande te haces tú mismo)... Que como decía León Felipe,  no importa llegar solo y  el primero, sino con todos y a tiempo.

Awi Ni'ta agradece a la tribu todo lo que le han ayudado y todo lo que le han enseñado (curioso, el que tenía que enseñar no puede decir que sea el que más ha aprendido pero, al menos, tanto como el que más de los pequeños de la tribu) y siempre tendrá en su tipi un lugar reservado para el que quiera visitarlo, cerquita del fuego y con olor a incienso.